lunes, 10 de marzo de 2014

Al otro lado de la valla ...

     
 Al joven de Togo que señalaba la piel negra de su mano
                                                                              como una maldición
Al otro lado de la valla,
mi hermano Ahmed
grita su hambre de muchos siglos.
Al otro lado de la valla,
mi hermano Justin
grita su cansancio de muchos desiertos.
Al otro lado de la valla,
mi hermana Désirée
grita su miedo de muchas muertes.
Al otro lado de la valla,
mi hermana Mariam
grita su dolor de embarazada exhausta.
Al otro lado de la valla,
mis hermanas Mariam y Désirée,
mis hermanos Justin y Ahmed
gritan y gritan
su hambre, su cansancio, su miedo, su dolor.

A este lado de la valla,
pienso en el próximo viaje, en el próximo menú, en el próximo paseo, en la próxima compra.
(Ellos tienen muy próxima...la valla.)

Pero
a este lado de la valla,
me estremecen
los ojos desorbitados anegados en lágrimas de hombres que llevan dentro muchos niños heridos, 
los gritos de rabia, en francés, la lengua del negrero, mi lengua (¡qué vergüenza!),
las manos desgarradas y esposadas,
las súplicas desvalidas
de mis hermanos.
Y oigo la voz de nuestro Padre, tierno y delicado con cada uno de sus hijos:
¿Qué has hecho con tu hermano?

Al otro lado de la valla,
Jesús y María
no se parecen a las imágenes de nuestros templos,
tan alejados de nuestro mundo y de nuestro Dios.
Al otro lado de la valla,
con la cara cruzada por el alambre,
con las manos desgarradas por las púas,
como Ahmed y Justin,
como Désirée y Mariam,
en medio de ellos,
Jesús y María me llaman:
¡Despierta, levántate, libérate de lo que te estorba, mira a tus hermanos.

A este lado de la valla,
de momento,
sólo puedo decir
desde lo hondo:
¡Perdón!
Y buscar la manera
de compartir el pan
ya
para que nazca a la vida
el hijo de Mariam...
O renunciar
a seguir a Jesús,
(a hacer “como si”):
Su Sangre,
la “de la Alianza nueva y eterna”,
“derramada por [n]osotros”, todos nosotros,
por nuestra liberación,
está en la valla.


                                                                          Madrid 17 / 10/ 05

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